Concepto
La ecografía es un tipo de imagen médica que utiliza ondas de sonido de alta frecuencia (ultrasonidos) para producir imágenes de órganos internos y de otros tejidos.

Durante una ecografía, un dispositivo denominado transductor convierte la corriente eléctrica en ondas sonoras que se envían a los diferentes tejidos del organismo. Las ondas sonoras rebotan en las estructuras del cuerpo y se reflejan en el transductor, que las convierte en señales eléctricas. Después, a través de una computadora, las señales eléctricas se convierten en una imagen, que se visualiza en un monitor y se registra como una imagen digital de computadora. No se utilizan rayos X, por tanto, durante una ecografía no hay exposición a la radiación.
La ecografía es un método indoloro, relativamente barato y que se considera seguro, incluso durante el embarazo.
Procedimiento
Para examinar determinadas partes del abdomen mediante ecografía, se suele pedir a la persona que se abstenga de comer y beber desde varias horas antes de la prueba. La acumulación normal de gases en los intestinos por comer o beber a veces puede dificultar la obtención de imágenes de ultrasonido. En otros casos, como una ecografía de los órganos reproductores femeninos, se les puede pedir que beban una gran cantidad de líquido para llenar la vejiga.
Por lo general, el examinador coloca un gel espeso sobre la piel del área que se va a examinar para asegurar una buena transmisión del sonido. Se coloca sobre la piel un transductor manual, que se desplaza sobre la zona a evaluar.
Después de la prueba, la mayoría de las personas pueden reanudar las actividades cotidianas de manera inmediata.


Beneficios
- Las imágenes obtenidas con ultrasonidos se adquieren con la rapidez suficiente como para mostrar la motilidad de los órganos y de las estructuras del cuerpo en tiempo real.
- La ecografía se utiliza con eficacia para obtener imágenes de los órganos internos del abdomen, la pelvis y el tórax. No obstante, dado que las ondas de ultrasonido son bloqueadas por el gas (por ejemplo, en los pulmones o el intestino) y por el hueso, la ecografía de los órganos internos requiere unas habilidades especiales por los médicos.
- Ayuda a la temprana detección de cálculos biliares y obstrucciones en las vías biliares
- Ayuda a la detección de tumores y otros trastornos en el hígado, bazo y páncreas.
- Ayuda a diferenciar quistes benignos de masas sólidas (que pueden ser cancerosas) en los riñones o para detectar obstrucciones tales como piedras u otras anomalías estructurales en los riñones, los uréteres o la vejiga.